Estos mamíferos han estado en contacto cercano con los humanos durante cientos de años. Son responsables o están implicados en la diseminación de enfermedades humanas y de animales.
La amenaza epidemiológica actual de los roedores no es tan significativa como en la antigüedad, debido a los programas de control de roedores e insectos, antibióticos eficaces y la mejora de la higiene en la sociedad.
Contenidos de este artículo:
Acerca de las plagas de roedores
Tipos de roedores
Control de plagas de ratones
La dispersión de enfermedades por ratas no es la principal razón por la cual se controlan; es más bien debido a sus hábitos, como vivir y trasladarse a través de cloacas y basura. Aun así, siguen habiendo casos de transmisión de enfermedades humanas y zoonóticas por roedores, además del constante potencial de brotes de enfermedades que pueden ser aceleradas e intensificadas por estos mismos en ciudades donde los ratas y ratones viven cerca de los humanos.
Algunas de las enfermedades que transmiten son la peste bubónica, tifus murina, viruela rickettsial, salmonelosis, leptospirosis, coriomeningitis linfática, triquinosis, hantavirus, tifoidea y disentería.
Los roedores también son una plaga de importancia económica. Se estima que contaminan cada año suficientes víveres almacenados para alimentar a 200 millones de personas por medio de su orina, heces o pelo. También causan daños estructurales en puertas, pisos, techos y paredes como consecuencia de comportamientos como roer y construir madrigueras.
En el mundo moderno, la delicada infraestructura que requiere la tecnología para funcionar es amenazada por sus hábitos; estos pueden causar pérdidas millonarias de producción debido a apagones de sistemas computacionales complejos. En 1996, el acceso a internet del estado de California, EUA, se interrumpió debido a que una rata masticó el cableado.
Además de las pérdidas económicas asociadas a los roedores de forma directa e indirecta en los sistemas de salud, el control de ratones no es barato. En los Estados Unidos, se gastan 120 millones de dólares al año en programas de control de roedores y a nivel mundial, probablemente está en los billones.
Hay tres principales clases de roedores encontrados en zonas urbanas:
El ratón casero es el mamífero con mayor distribución en el mundo y el principal roedor plaga; se reproduce todo el año, es curioso hacia objetos nuevos y mordisquea intermitente la comida. Tanto la rata de tejado como la rata noruega se reproducen mayormente en primavera y otoño, son cautelosas hacia objetos nuevos y comen a un ritmo constante.
La rata noruega es más grande, fuerte, agresiva y está mejor adaptada para reproducirse y sobrevivir en climas fríos, a diferencia de la rata de tejado y el ratón casero; esto la convierte en la especie con mayor distribución de los Estados Unidos.
Esta especie de roedores se localiza predominante en ciudades costeras; es común que causen problemas en embarcaciones. Dentro de edificios, es común encontrarlas en los niveles inferiores y las ratas de tejado en vegetación exterior, pisos superiores y áticos.
Las 3 especies de roedores comensales tienen la característica de poseer 4 dedos en las patas delanteras y 5 en las traseras:
La importancia de identificar la especie para el control de una plaga de ratones radica en las diferencias de hábitos de conducta hacia objetos nuevos, temporada de reproducción, y tipo de anidación que presentan.
Estos factores determinarán la implementación métodos de control de ratas efectivos para cada caso. El manejo integral de plagas de ratas es especialmente importante para los roedores e incluye inspecciones, limpieza, control de roedores por exclusión y reducción de poblaciones (trampeo o uso de raticidas).
Las inspecciones incluyen la identificación de heces, pisadas, objetos masticados, madrigueras, corredores, manchas grasa y orina, roedores vivos o muertos, sonidos y olores (especialmente ratones).
La limpieza de desratización consiste en reducir las fuentes de alimento, agua y de resguardo disponibles para los roedores; esto incluye fuentes interiores y exteriores.
El control de ratones por exclusión es eliminar físicamente todas las rutas posibles de entrada de roedores al edificio; es difícil y poco práctico realizarse con ratones por su tamaño reducido.
La reducción de poblaciones mediante trampas de captura viva es especialmente efectivo para los ratones, cuando las densidades son bajas o es necesario evitar contaminar el ambiente con cebos. Los cebos tóxicos son variados en presentación y modo de acción, por lo que se deben utilizar de manera estratégica para asegurar su efectividad.
Para saber más:
Bennet G W, Owens J M, Corrigan R M (1997). Truman’s scientific guide to pest control operations. Fifth edition, Lachina Publishing, Ohio, USA. pp 327-356.